La F1 debería frenar artificialmente a Mercedes, propone Seidl

La carrera de Monza llegó después de dos Grandes Premios en los que no hubo demasiada acción. Parecía que la monotonía y el dominio de los Mercedes se iba a alargar también en Italia, pero la realidad fue muy distinta; fue una carrera en la que pasó de todo: un coche de seguridad, una bandera roja, una relanzada de la carrera en parado y los Mercedes, fuera del podio.